Desde el 1 de agosto hasta el 30 de noviembre de este año van a estar vigentes las recomendaciones anuales de velocidad y tráfico marítimo que fueron establecidas por la Organización Marítima Internacional (OMI) para la protección en la temporada de migración de cetáceos y de avistamiento de ballenas por las aguas de Panamá.
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Estas medidas limitan a 10 millas náuticas la velocidad a la que deberán transitar las embarcaciones por las áreas de navegación establecidas.
Según el comunicado, desde el 1 de diciembre del año 2014, Panamá tiene dispositivos de separación del tráfico marítimo en Cristóbal, en el mar Caribe y en la costa del Océano Pacífico de la República de Panamá, ambos en las rutas de navegación de entrada al Canal de Panamá.
Señaló el administrador Jorge Luis Quijano: “El Canal de Panamá está comprometido con la biodiversidad y el desarrollo sostenible, por lo que promueve la conservación de los cetáceos mediante un llamado al seguimiento de las recomendaciones y guías establecidas por los dispositivos de tráfico marítimo existentes. Estas medidas no sólo buscan proteger a los cetáceos de colisiones con las embarcaciones, sino también una ordenación adecuada en los océanos”.
Estos dispositivos disminuyeron considerablemente la probabilidad de que sucedan incidentes y accidentes graves de ballenas jorobadas y de otro tipo de cetáceos, y esto garantiza la seguridad marítima y el control de las embarcaciones que transitan por nuestras aguas.
Fuente: Metro Libre