La Cámara Panameña de la Construcción continúa denunciando el incremento inconsulto de los impuestos para la construcción en la Ciudad de Panamá, que van desde 11% y hasta 328%, según lo indicaron en un comunicado en el cual advierten que es la población en general la que se verá afectada por el encarecimiento de las viviendas, con la entrada en vigencia de las nuevas tasas arancelarias.
El gremio indicó que desde el segundo semestre de 2015 el sector de la construcción en Panamá ha decrecido, lo que ha provocado una reducción drástica en el número de empleos que se generaban, que en algún momento llegó a representar 17,7% de la población del país, laborando en ese área.
«La Cámara Panameña de la Construcción lamenta que a través de esta decisión precipitada e inconsulta, se le haga llegar a la industria de la construcción un mensaje negativo y hostil, precisamente en las vísperas de las fiestas navideñas», señala el comunicado emitido por el gremio.
Capac indica que con esas nuevas tasas impuestas por la Alcaldía de Panamá, la gestión de un permiso de construcción para una obra de 10 millones de dólares, pasará de costar 33,750 dólares, a costar 125.006 dólares, lo que indudablemente tendrá una incidencia directa en el costo de las viviendas, en el caso de las construcciones que sean para unidades habitacionales.
La organización no sólo alerta sobre los incrementos de los impuestos, sino que además destaca que durante los últimos dos años el sector de la construcción se ha visto golpeado de la misma manera por el aumento de los precios de los materiales y en el costo del metro cuadrado de construcción que aumentó 7,4% en 2016.
El gremio tildó la medida como un «regalo indeseado» por parte de la Alcaldía de Panamá y el Consejo Municipal de la capital del istmo.
Finalmente, Capac instó al alcalde de Panamá a abstenerse de promulgar las nuevas tasas arancelarias y que consulte al gremio de la construcción para evitar cualquier acción que pueda perjudicar el desempeño del sector.