Un francés y una alemana fueron condenados por el Tribunal penal central de Bagdad a cadena perpetua por pertenecer al grupo yihadista Estado Islámico (EI), indicó un periodista de la AFP presente en la audiencia.
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El francés Lahcen Gueboudj, de 58 años, y la alemana, de quien sólo se dio a conocer su nombre de pila, Nadia, fueron condenados por separado. La alemana es la hija de Lamia K., que en enero de este años fue condenada a pena de muerte, aunque luego en abril su pena fue conmutada por cadena perpetua.
En la legislación iraquí, la cadena perpetua equivale a 20 años de prisión.
Durante la audiencia, Gueboudj, con el pelo cano cortado corto, barba de varios días y un uniforme marrón de prisionero, respondió durante media hora a las preguntas del juez, desmintiendo sus declaraciones durante los interrogatorios a los que fue sometido, citadas por el juez.
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“Firmé la confesión en árabe sin saber lo que estaba escrito”, dijo hablando en francés con acento del sur de Francia.
Por su parte, Nadia explicó en un alemán mezclado con árabe que llegó a Irak pasando por Turquía y Siria junto a su hermana, que murió en un bombardeo, su madre y su hija.