Las autoridades de socorro de Panamá encontraron este lunes el cadáver de un hombre que quedó sepultado por un derrumbe hace seis días a causa de los embates del huracán Otto, que dejaron otras 8 muertes en el país.
La víctima, identificada por la comunidad como Virgilio Martínez, fue vista por última vez entrando a su casa el martes pasado, cuando las fuertes lluvias de Otto azotaban a Panamá, país por el que no pasó el ojo del huracán.
El Sistema Nacional de Protección Civil (Sinaproc) informó del hallazgo de Martínez en su cuenta de Twitter.
Los cuerpos de seguridad y socorro que integran la Fuerza de Tarea Conjunta (FTC) buscaron al adulto, de 53 años, por seis días consecutivos, con varias suspensiones debido al mal tiempo.
El Gobierno de Panamá atribuye a los efectos de Otto otras tres muertes, la de un niño que pereció en la camioneta de su madre cuando les cayó encima un gigantesco árbol, en la capital, y la de un joven matrimonio cuya casa colapsó producto de la humedad del terreno, en la periferia oeste de la ciudad.
Otras cinco muertes sucedieron durante los días que Otto afectó al país, sin embargo el Gobierno no las atribuye específicamente al fenómeno por considerar que las personas fueron imprudentes al no acatar las advertencias de las autoridades.
Entre estas muertes están las de dos jóvenes, una menor de 14 y un varón de 18, este último de nacionalidad colombiana, quienes fueron arrastrados el domingo 20 de noviembre por un río crecido en la periferia este de ciudad de Panamá.
También permanecen desaparecidos un venezolano y un guyanés, dos de los tres marinos que abordaron una balsa inflable el pasado martes cuando su embarcación pereció frente a las costas de Colón, en el Caribe de Panamá.
Tres de los seis tripulantes originales del barco «Jessica» fueron rescatados al momento del accidente por el Servicio Nacional Aeronaval (Senan) de Panamá, pero los otros tres tomaron la opción de la balsa, de los cuales uno, de nacionalidad haitiana, fue rescatado por un guardacostas de Estados Unidos luego de cuatro días a la deriva.
Otto atravesó Costa Rica y Nicaragua el jueves como huracán de categoría 2, con vientos de hasta 175 kilómetros por hora y torrenciales lluvias.
En Costa Rica, que recibió por primera vez desde que hay registros el impacto directo de un huracán, Otto dejó al menos 10 personas fallecidas, 11.000 damnificados y 2.778 kilómetros de caminos y carreteras dañados en un total de 412 pueblos.
En Nicaragua no se han registrado fallecidos, pero sí cuantiosos daños a viviendas en la región del sureste.