Un tribunal alemán rechazó este jueves la petición de asilo de un soldado estadounidense que se fugó de la base militar de su país en Baviera para no volver a ser enviado a Irak.
El tribunal de lo contencioso-administrativo de Múnich falló en contra de André Shepherd, que había denunciado que la Oficina Federal para la Migración y los Refugiados (BAMF) le había denegado su petición.
El ciudadano estadounidense alegó que su país estaba cometiendo crímenes de guerra en Irak y que no participaría en ellos, pero el tribunal alemán ha entendido que su deserción no era el último recurso para evitarlo, explicó el portavoz del tribunal, Florian Huber.
La sentencia apunta que el soldado, de 39 años, no trató de ninguna otra forma de no volver a ser enviado a Irak.
Su demanda volvió ayer al sistema judicial alemán después de que se consultase en 2013 al Tribunal de Justicia de la Unión Europea sobre el caso y éste respondiese, dos años después, que la amenaza de una pena de cárcel o la expulsión del ejército no eran motivos suficientes para la concesión de asilo según el derecho europeo.
El soldado huyó de su base en 2007, poco antes de volver a ser enviado a la guerra de Irak como técnico de mantenimiento de helicópteros de combate, donde ya había estado seis meses entre 2004 y 2005.
Shepherd está casado con una alemana y tiene, en consecuencia, un permiso de residencia permanente.