El tribunal de Aalborg (noroeste de Dinamarca) prolongó este lunes a cuatro semanas la prisión preventiva a la hija de Choi Soon-sil, la «Rasputina surcoreana» y protagonista del escándalo que causó la destitución de la presidenta de ese país, Park Geun-hye.
La justicia danesa aceptó así la petición de la Fiscalía, que había reclamado que Chung Yoo-ra continuase en la cárcel porque aún no se ha terminado de estudiar la solicitud de extradición de las autoridades surcoreanas.
La Fiscalía danesa había informado hace tres días de que ha pedido más información a Seúl sobre el caso y que podían pasar «varias semanas» antes de tomar una decisión sobre su extradición.
Chung Yoo-ra, contra quien había una orden de arresto internacional, fue detenida el 1 de enero en un piso a las afueras de Aalborg tras recibir la policía danesa un aviso de una periodista surcoreana, y al día siguiente pasó a disposición judicial.
Seúl cree que la joven, de 20 años, recibió trato preferencial en la universidad y el bachillerato -cuyo título se le ha retirado por considerar que sus calificaciones y registros de asistencia fueron falsificados- por los lazos de su madre con la presidenta.
Choi, amiga íntima de Park, está considerada el cerebro de la trama de corrupción y tráfico de influencias que llevó al Parlamento surcoreano a destituir a la presidenta, una decisión que aún debe ser ratificada por el Tribunal Constitucional.
La «Rasputina surcoreana» está acusada de intervenir en asuntos de Estado pese a no ostentar cargo público y extorsionar a grandes empresas para obtener dinero que se habría apropiado parcialmente.
La Fiscalía cree que el grupo Samsung, el mayor de Corea del Sur, firmó un contrato de unos 22.000 millones de wones (unos 17,3 millones de euros) con una empresa con sede en Alemania propiedad de Choi y dio además apoyo financiero para que Chung, que se dedica a la hípica, entrenara en el país teutón y adquiriera caballos.
Chung, que justificó precisamente su estancia en Dinamarca con sus ocupaciones relacionadas con la hípica, ha negado las acusaciones, aunque admite haber firmado papeles que le fueron presentados por su madre varias veces.