El servicio eléctrico en el área metropolitana de Panamá y la provincia de Colón se ha recuperado en 95% tras el apagón que anoche afectó a esta región neurálgica del país durante horas, informó este sábado una fuente oficial.
Dos subestaciones que alimentan a unos 114.000 usuarios del norte y noreste de la capital siguen afectadas y de acuerdo con la Fuerza de Tarea Conjunta (FTC) comenzarán a funcionar cerca de las 12:00 hora local.
Técnicos de la Empresa de Transmisión Eléctrica, S.A. (ETESA) continúan las labores de «estabilización» de las subestaciones afectadas por la explosión de un conjunto de transformadores la noche del viernes, aunque ya han logrado recuperar «más del 95% de la carga», indicó la fuente oficial.
Los trabajadores de la compañía trabajarán a la par en la sustitución de los equipos afectados, explicó la FTC, que está conformada por todos los cuerpos de seguridad y socorro del país.
Las subestaciones que permanecen sin electricidad son las de Monte Oscuro y Tinajitas.
La primera abastece a sectores populares como el municipio de San Miguelito, Villa Lucre, Río Abajo, Parque Lefevre, Panamá Viejo y Chanis, y el exclusivo barrio de Costa del Este.
Mientras que Tinajitas alimenta a barriadas de la periferia como Santa Librada, Villa Zaíta, San Isidro, Cerro Batea, Torrijos Carter y Santa Marta, indica el portal web de ENSA, la distribuidora que las administra.
Por los trabajos de reparación, algunos sectores centrales de la capital panameña que recuperaron el servicio anoche, como el barrio de El Cangrejo, se han vuelto a quedar sin luz este sábado, informó su distribuidora, Gas Natural Fenosa.
El apagón causado por la explosión de tres transformadores afectó a la capital y Colón, donde habita el 60% de la población del país, a partir de las 20:37 hora local del viernes y durante más de dos horas.
El metro de la capital informó de la suspensión del servicio y el cierre de las estaciones, mientras que la Autoridad del Canal de Panamá (ACP) indicó a Efe que el tránsito de buques continuó con normalidad gracias a plantas eléctricas.
El apagón sacó de operaciones a la planta potabilizadora de Chilibre, que abastece a buena parte de la capital, por lo que el presidente pidió a la población hacer un uso racional del agua.
La empresa ENSA pidió a sus clientes, del noreste de la capital, tomar medidas para disminuir su consumo mientras dure la contingencia, una petición de la que se hizo eco el presidente, Juan Carlos Varela.
Los transformadores dañados tienen una vida útil de 20 a 25 años, pero están explotando antes del tiempo previsto por razones que se desconocen, explicó el gerente general de ETESA, Iván Barría.
El directivo dijo a RPC Radio que ya se habían comprado los reemplazos de estas piezas y que se procederá a hacer el cambio.