Uruguay quedó más cerca del Mundial de Corea del Sur de este año, al enlazar su segunda victoria en el hexagonal final, esta vez de remontada por 2-1 sobre Brasil, que terminó desquiciado por la expulsión de dos jugadores.
La Celeste acumula seis puntos pues en la primera goleada vapuleó por 3-0 a Argentina, en tanto que la Canarinha quedó estacionada con 1, el que sustrajo de su empate 2-2 con Ecuador el pasado lunes.
Los pupilos de Rogério Micale volvieron a demostrar falta de equilibrio para sostener los resultados. El lunes pasado ganaban por 0-2 a los anfitriones y terminaron cediendo un 2-2.
Y la experiencia resultó peor pues salieron con las manos vacías del estadio Atahualpa.
Uruguay remontó el tanto de Gilherme Arana al minuto 23 con los de Rodrigo Amaral en el 59, y el de Matías Cuña, cuando transcurrían dos minutos del tiempo añadido.
En la tercera jornada, que se disputará este domingo, los uruguayos chocarán con Colombia, que hoy dio vida a Argentina al caer por 1-2, y la verde-amarela se las verá con Venezuela, que tiene hoy cita pendiente con Ecuador.
Tras un comienzo con ocasiones de gol alternas, Guilherme Arana, capitalizó por el callejón izquierdo un pase de Neres.
Aún no había asimilado el mazazo Uruguay cuando Neres se perdió el segundo al minuto 52.
Siete minutos después Amaral cambió la historia y ratificó su condición de cañonero al igualar. Su remate partió desde fuera del área. La pelota primero impactó en el vertical izquierdo y luego continuó al fondo del arco de Lucas.
La historia se torció para Brasil a partir de los 67 minutos con la expulsión de Luchas Cunha al recibir la segunda tarjeta amarilla.
Lucas volvió a salvar a Brasil al neutralizar un remate de Nicolás De La Cruz, al minuto 68.
Y se ratificaba como figura en sucesivos duelos con los delanteros uruguayos.
De La Cruz estrelló el balón en el vertical izquierdo, tras un bien dirigido tiro libre, al minuto 85.
Al filo de los noventa minutos Brasil se quedó con nueve jugadores por la expulsión del defensa central Lyanco.
No parecía tan grave, pues el partido caminaba hacia el fin, pero dos minutos después, a los 92, Uruguay encontró la agónica victoria con un tiro libre ejecutado por Matías Viña.